El recuerdo que nos quedará de marzo y abril de 2020 es el de la obligada separación física entre seres queridos.
En 1998, Francisco Céspedes compuso «Vida loca», una bellísima oda al amor y al dolor de la lejanía.
Hemos grabado con mucho cariño esta versión acústica, con arreglos del joven Antonio Belmonte para la instrumentación habitual de Alhambra Albacete.
Con el deseo de veros pronto, en persona, os enviamos un fuerte abrazo a todos, y en especial a las familias de personas con autismo.
Este virus lo paramos entre todos.